Viaje a Polonia (I parte)

Por estas fechas estaba preparando el año pasado mi super viaje a Polonia. Tengo la idea firme de que hay que realizar un viaje importante al año (ir a Benidorm a tostarse al sol en verano, no cuenta) y ya que ha acabado el 2011, supongo que mi super viaje fuese.
No es el país más impresionante del mundo, pero tiene ciudades bastante bonitas y lugares históricos como Auschwitz que, para mí, es uno de esos sitios que todo ser humano debe visitar alguna vez en su vida. Además, tenía mucha curiosidad por sentir un frío extremo. Dado que fui en febrero, supongo que las temperaturas estarían bajando pero aún así ¡ya sé lo que son los -17º!
En otra web ya publiqué en su día un artículo, que reproduzco a continuación, sobre mis primeras impresiones así como consejos útiles para no sentirte perdido en los días que pases allí.
«Polonia se presenta como un país muy interesante para visitar, aunque quizás en la época invernal muchos lo desechen de posible destino por las bajas temperaturas que puede llegar a alcanzar, con picos de -20º. No obstante, resulta atractivo también visitarlo en invierno, donde la nieve y el frío son los protagonistas. Eso sí, hay que hacer una adecuada selección de la ropa de abrigo. Hay que tener en cuenta, de este modo, que en esta estación del año anochece sobre las 17.00 horas.
Así, es curioso cómo los polacos tienen la costumbre extendida de cerrar la puerta tras de sí inmediatamente después de entrar en cualquier establecimiento. Esto se explica porque la agradable temperatura del local puede verse afectada por un solo minuto que la puerta esté abierta. Además, si esta acción no se pone en práctica, el turista se topará con la mala cara del dueño del establecimiento.
Algunas palabras prácticas
Probablemente excepto en Cracovia sea difícil comunicarse en inglés ni tan siquiera en sitios como las estaciones de tren o en la gran mayoría de los comercios. Por eso, resulta imprescindible apuntarse algunas palabras usuales.
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Varsovia
El típico “buenos días” es esencial: dzień dobry (pronúnciese “yen dobry”), así como “gracias”: dziękuję(“yencuie”). Si se viaja a una ciudad en la que hay varias estaciones de tren, la principal recibe la denominación de główny.
Respecto a los establecimientos que irán apareciendo en las calles es bueno saber que una kawiarnia es una cafetería (no en vano, kawa es café), una cukierniaes una pastelería (en las principales ciudades polacas se encontrarán multitud de ellas) y si leemos sklep se tratará de una tienda.
A la hora de comprar agua, si se prefiere sin gas, hay que fijarse que en el envase esté inscrito niegazowana (sin gas).
El “zloty”, la moneda de Polonia
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Casa de Copérnico, en Torun
Conviene saber que a fecha de la redacción de este artículo 1 euro equivale a aproximadamente 3,90 zlotys, eso sí, si se cambia en un Kantor(oficina de cambio del país), ya que hacerlo en España puede suponer un cambio bastante peor. Así, se recomienda llevar los zlotys justos para la llegada a Polonia y una vez allí dirigirse a estas oficinas de cambio y adquirir el resto.
Por otra parte, los estudiantes están de suerte (ya estén de Erasmus en el país o posean el carné internacional ISIC) pues gozan de un 50% de descuento en los trenes y autobuses interurbanos. A esta ventaja se unen importantes descuentos en determinados restaurantes.
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Wroclaw
Respecto al transporte, las grandes ciudades poseen servicio de autobuses así como de tranvía. El turista se extrañará cuando se monte en ellos y observe que el conductor no vende billetes (estos se adquieren en las máquinas situadas en las paradas). No obstante, los más despistados que no se asusten si no lo compraron: puede que tengan suerte y no se encuentren con el revisor.
“Pierogi” y vodka: la comida y bebida más típica
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Cracovia
Los que disfrutan degustando la gastronomía típica de los lugares, comprobarán la interesante oferta culinaria que posee Polonia. Respecto a la comida lo que el turista encontrará por todas partes es el pierogi, una especie de ravioli con distintos rellenos y de tamaño superior. Otra propuesta muy curiosa es el zurek, una sopa de champiñones en un atractivo envase: un pan duro con tapa que también se puede comer.
Por su parte, el vodka supone la bebida por excelencia de los polacos. Sobre marcas y sabores hay una gran variedad, pero quizá los más conocidos son el Zubrowka, Sobieski y Krupnik.
Como ocurre en todos los países hay restaurantes más caros y otros más baratos pero en Polonia es bastante fácil encontrar buena comida a muy buen precio: es posible comer por menos de 20 zlotys (unos 5 euros).

 Finalmente, hay que destacar la simbología usada en los baños públicos para diferenciar los de hombres y los de mujeres. Si bien es cierto que en la mayoría usan la convencional, es posible encontrar un círculo para referirse a que es un baño para mujeres y, para los hombres, un triángulo con el vértice hacia abajo.

Con estas particularidades y detalles bien apuntados ya solo queda disfrutar de este viaje a la tierra de Copérnico y Chopin. «

0 respuestas

  1. Tu artículo es muy interesante. Soy polaca y me intereso mucho como los espanoles miran a nosotros polacos. Pero tengo una cosa importante – la mas popular comida en Polonia es „bigos” („pierogi” también). En cada fiesta importante en familia, en dìas libres.. „bigos” es obligatorio sobre nuestra mesa 🙂

    Konsuela, de verdad no has podido encontrar nada comentarios en Internet? Porque el hostal Blooms es muy popular en Poznań 🙂 Muchos clientes extranjeros cuando visitan Polonia se alojan en este hostal porque hay un centro de la ciudad. Más informaciónes te podrías encontrar en su pagina web http://www.blooms.es/hostel/ porque está traducida! 🙂

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